Las enfermedades que se pueden transmitir con un simple saludo de manos no son pocas. Cerca del 80% de las enfermedades contagiosas como la gastroenteritis, la gripe, e incluso el ébola, se pueden transmitir por el contacto de las manos con el foco de infección, por lo que la higiene habitual de manos es una medida primordial para disminuir las posibilidades de contagio. No lo decimos nosotros, fue la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La pandemia de la COVID nos ha enseñado e inculcado la importancia del lavado de manos constante pero también han desaparecido saludos como los dos besos para sustituirlo por el choque de manos.
Consejos para evitar contagiarse
El lavado de manos es una medida fundamental para la prevención de cualquier enfermedad, pero no basta con el agua, son necesarias soluciones hidroalcohólicas o un simple jabón y mantener un especial cuidado antes y después de cocinar, comer, o usar el baño.
Un adecuado lavado de manos debería de durar al menos 20 segundos:
- Mojar las manos hasta las muñecas, aplicar el jabón y frotar las palmas, el dorso, los dedos y las muñecas
- proceder al aclarado con agua
- secar muy bien, ya sea a través de una toalla de un solo uso o de una máquina secadora de alto rendimiento.
Ante los síntomas de una enfermedad contagiosa, se recomienda seguir con el uso de las mascarillas, que tantas enfermedades nos han evitado estos dos últimos años.
Las enfermedades que se pueden transmitir con un simple saludo de manos
Las oficinas y los espacios públicos de mucho tránsito, como los aeropuertos, deben ofrecer soluciones para garantizar la higienización de manos de sus usuarios y así impedir que se produzcan casos de contaminación cruzada. Dispensadores de soluciones en base a hidroalcohol, colocados en puntos estratégicos, han demostrado ser efectivos para impedir el contagio.
Si el producto que se ofrece va a ser compartido por varias personas es importante garantizar la posibilidad de higienizarse las manos antes de proceder a su uso. Lo mismo al compartir objetos personales como ordenadores o teléfonos móviles, que suelen acumular gran cantidad de bacterias por su contacto continuo con las manos.